La diabetes es una enfermedad crónica que se caracteriza por la presencia de altos niveles de glucosa en la sangre (hiperglucemia). El páncreas no genera suficiente insulina para metabolizar el azúcar, o la que genera no resulta efectiva. La insulina es la hormona que permite que la glucosa ingrese a las células y su posterior uso como fuente de energía. Cuando este mecanismo se altera, la glucosa se acumula en el torrente sanguíneo.
En este artículo queremos dar un plan nutricional antidiabetes para prevenirla. Si estás interesado en la nutrición del diabético puedes leer nuestro artículo ya publicado.
La diabetes mellitus tipo II es la forma más común de diabetes. Sólo un 10% se encuadran entre la diabetes gestacional y la de tipo I. La de tipo II suele permanecer muchos años sin diagnóstico debido a que la hiperglucemia se desarrolla de forma gradual.
En un principio no se evidencia su gravedad hasta el punto de mostrar los síntomas clásicos de la diabetes. Si has obtenido la glucemia alterada en tu analítica, con un plan dietético adecuado puedes prevenir la aparición de diabetes tipo II; e incluso mejorar la sintomatología sí ya la padeces.
Terapia nutricional para prevenir la diabetes
El objetivo del nutricionista es proporcionar estrategias de prevención de la diabetes mediante un estilo de vida adecuado. Entre las medidas principales destacan una dieta adecuada y la actividad física. Una regla de oro para ti: los alimentos aumentan los niveles de glucosa en sangre, y la insulina y el ejercicio los bajan.
La cantidad y calidad de carbohidratos consumidos en cada comida es uno de los aspectos más importantes de la dieta. Estos carbohidratos deben tener un bajo índice glucémico, y la cantidad aportará aproximadamente la mitad de las calorías necesarias para afrontar tu día. Si dichos alimentos son ricos en fibras, la cantidad puede incrementarse hasta el 60% de las calorías diarias totales.
Los carbohidratos afectan el índice glucémico con diferente rapidez. Esto es debido a que cada fuente de carbohidratos presenta una absorción digestiva muy variable. Leyendo la etiqueta de cada paquete de producto puedes averiguar cuántos carbohidratos, proteínas, grasas o fibras contiene.
Asesórate con tu nutricionista para establecer la cantidad y tipo de carbohidratos más beneficiosos para ti.
Alimentos prohibidos en tu plan nutricional anti diabetes
El azúcar provoca una captación súbita y eleva la glucosa en sangre debido a su rápida absorción. Es recomendable reemplazar el azúcar con edulcorantes no nutritivos. Ten en cuenta que algunos productos bajos en grasa a veces tienen un alto contenido de azúcar.
Verifica en las etiquetas las palabras que terminan en partículas “-osa” como sacarosa, fructosa y dextrosa; también se trata de azúcares, pero con nombres diferentes. Según la dieta prescrita por el nutricionista a cada persona, la sacarosa, azúcar de mesa normal, no debe superar el 5% del total de calorías. Los principales alimentos a evitar son:
– Azucares y sus derivados: Azúcar blanco, azúcar moreno, miel, siropes como el de arce o arroz, chocolates con menos del 80% de cacao. Atención al etiquetado de dulces con jarabe de maíz.
– Platos elaborados con condimentos grasos como bechamel, manteca de cerdo, patés, quesos (lasaña, tortellini, canelones, risotto, etc).
– Sustitutos del pan con grasa añadida y sal: pizzas elaboradas, galletas, colines, bollos, etc.
– Lácteos enteros y sus derivados: helados, leche condensada, nata, mantequilla y yogures y quesos grasos.
– Carnes grasas y embutidos: salchichas, chorizo, salami, mortadela…
– Atención a ciertas frutas, frutas en almíbar o deshidratadas, plátanos, uvas e higos.
– Bebidas: las alcohólicas especialmente las de elevada graduación alcohólica, los zumos y cualquier refresco o bebida con azucares añadidos.